Conserva minerales como calcio, magnesio, hierro y zinc debido a su extracción artesanal, lo que le da más valor nutritivo comparado con sales altamente refinadas.

Su perfil de sabor mineral y textura característica realzan los platos sin necesitar grandes cantidades, perfecto para condimentos, ensaladas o como acabado gourmet en carnes y vegetales.

Al no pasar por refinamiento industrial intensivo, mantiene su composición mineral intacta, lo que le brinda mayor integridad natural.

Tiene un contenido de sodio relativamente menor que algunas sales refinadas, lo que la hace una mejor opción para quienes cuidan su presión arterial o tienen sensibilidad al sodio.

Tradicionalmente usada en baños y preparados tópicos por sus propiedades cicatrizantes y desinflamantes (por ejemplo para alivio de articulaciones, heridas leves, etc.).

Su recolección respeta la tradición ancestral de las salineras de Maras, lo cual apoya comunidades locales y prácticas tradicionales. También su extracción al sol y de manera artesanal refuerzan su valor ecológico.