Relajación y reducción del estrés, la difusión de aceites como lavanda, manzanilla o jazmín ayuda a calmar la mente, reducir la ansiedad y promover un ambiente de paz en casa.

Mejora de la calidad del sueño, al generar una atmósfera suave, con luces tenues y aromas apacibles, favorece un descanso más profundo y reparador.

Purificación y humidificación del aire, el difusor libera pequeñas partículas de agua que, además de transportar el aroma, aumentan la humedad ambiental, ideal en climas secos o con aire acondicionado. Esto ayuda a cuidar piel, labios y vías respiratorias.

Ambiente saludable y libre de químicos agresivos, a diferencia de ambientadores convencionales con aerosoles o químicos, los difusores permiten usar aceites esenciales puros y naturales, lo que reduce la exposición a sustancias sintéticas.

Función segura, gracias al apagado automático al acabarse el agua, y al funcionamiento silencioso del tipo ultrasónico, es seguro usarlo por la noche o en presencia de niños.

Personalización del ambiente:
El modo de nebulización (continuo / intermitente) para adaptar a espacios grandes o pequeños.
La intensidad de la luz LED, o elegir luz tenue / nocturna, para ambientar según el estado de ánimo.